Mourinho es luchador, es profesional, es un estudioso del fútbol, es un ganador y es muchas más cosas, pero lo que de verdad admiro de él, por lo que de verdad va a pasar a la historia del fútbol español, no es ninguna de las cualidades antes mencionadas.
Mourinho nos ha hecho el favor a todos los aficionados al Fútbol en España de quitarle la careta a más de 100 años de falso señorío, de falsa elegancia y además ha quitado de un plumazo la careta a la falsa profesionalidad de la prensa deportiva de este país.
Mourinho está abriendo los ojos de millones de españolitos, españolitos que creían a pies juntillas lo que falsos profesionales del periodismo deportivo maquillaban sobre el falso señorío de su equipo, del Real Madrid.
Mourinho es Madridista, es como le gusta que digan a su Presidente, uno de los profesionales nacidos para estar en esa casa, en la del Real Madrid. Mourinho, como buen madridista, quiere el ancho del embudo, quiere ser el niño en el bautizo, el novio en la boda e incluso el muerto en el entierro, pero además, quiere que si por algún motivo no lo es, la prensa diga que sí, que lo fue y que el que el que le quitó protagonismo usurpó su lugar con malas artes, que robó el lugar que le correspondía al nacido para ello, al equipo de todos.
Mourinho no es más que la pura y viva imagen del Real Madrid, pero no la que nos venden, es la verdadera imagen del Real Madrid, es el espejo del señorío de concha Espina, es el más fiel reflejo de más de los mas de cien años de historia blanca blanqueada por falsos profesionales del periodismo.
Mourinho, de verdad, mucha gracias por hacer en menos de un año lo que muchos llevamos años intentando explicar.
