JUEVES DE FERIA, UN BRINDIS

No sé si iré a la feria, pero tanto si voy como si no, se perfectamente lo que haré. Es jueves de feria y por lo tanto, es tu día Antonio. Así que esté donde esté, me pediré una copita de manzanilla y a tu salud y mirando al cielo, brindaré por ti. No quiero recordarte, aunque no puedo evitarlo, en otros momentos, solo ahora, en tu día, en el día que tú te encargaste de convertirlo en especial dentro de los especiales de esta ciudad, de tu ciudad. Se hace largo el camino de un jueves a otro, de un año a otro, de una feria a otra, se hace largo sin ti. Se hace largo pero se aguanta, se aguanta y se soporta con la ilusión de verlo llegar, de ver como se acerca en el calendario ese día, ese jueves en el que otra vez volveremos a brindar juntos por nuestro Sevilla, por ese Sevilla que tu llevaste a la gloria un día de feria, perdón, un día de feria no, un jueves de Feria, como este y como todos los que vendrán. Espero, Antonio, que ya hayas preparado la intendencia para este día y que no te falte, allí en el tercer anillo, la manzanilla para nuestro brindis.